Experimentando un estado de plenitud

 

Cuando hayas pasado por cada una de las etapas que de descrito en este trabajo, habrás alcanzado aquello que toda la vida haz buscado e inclusive cosas que no creíste ser capaz de sentir o experimentar, las ideas y sentimientos estarán unificadas en uno solo contigo, entrarás a la conexión congruente entre sentimientos que vienen del corazón, pensamientos que vienen de la mente y palabras que vienen de la boca, cuando unifiques estas tres cosas habrás alcanzado este estado de espontaneidad positiva al que me refiero, tu vida girará en torno a un propósito mayor donde dejaras de perseguir cosas que realmente no valen tanto la pena, ojo, no valen tanto la pena, porque si son cosas importantes pero no son lo suficiente para dedicarles un exceso de tiempo y esfuerzo a ello, porque sabrás disfrutar de las cosas que Dios te ha dado y te ha permitido tener.

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Este camino es diferente para todos, algunos puede ser que vinieron a este mundo a formar una gran empresa y tener falta de una familia amorosa, esa puede ser su misión de vida y es totalmente respetable, pero si este es tu caso, cuando lo alcances estarás en paz contigo mismo porque sabrás dentro de ti que este es tu propósito en esta vida, en otras vidas ya tomarás otras decisiones, lo importante es que estés en calma y conexión contigo mismo, pero si dentro de ti no puedes sentirlo significa que hay cosas que debes trabajar para aprender a disfrutar y gozar de la vida que Dios te dio, que te permitió vivir y tener.

También sabrás que cosas quieres, que te gusta y que no tanto, sabrás vivir con eso, habrá paz y calma en tu corazón no más sufrir, no mas dolencias tanto físicas como sentimentales porque estarás abierto a conocer, aprender y conectar con la gente cada día, ya sea que los ames como miembros de tu familia o seas bueno con quienes solo verás una vez, sin importar nada, sabrás dar a mor, vibrarás en amor y abundancia, este es el estado que Dios quiere que cada uno de nosotros tengamos, está en tus manos alcanzarlo, está en tus manos, comenzar a cambiar para llegar a él o si ya estás cambiando no perder la fe ni las fuerzas, sino continuar por ese camino que en el fondo sabes que te está llevando hacia la tranquilidad y prosperidad.

Dios así lo permita en cada uno de ustedes, Amén.